El turismo es uno de los sectores más castigados por la pandemia de coronavirus. Este verano ha sido la peor temporada turística en España de la historia al recibir 25 millones de viajeros menos que en el verano de 2019, unas cifras dadas a conocer recientemente por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ya se sabía que el turismo iba a ser el gran perjudicado, pero se alentaba a una temporada que podía ser “salvada” por el turismo nacional. Pero nada de eso, los drásticos datos no dejan lugar a dudas. Y ya no solo por las estadísticas, son multitud los negocios hoteleros los que han decidido echar el cierre al no poder hacer frente a la nueva situación.
Y los hoteles y alojamientos turísticos que sobreviven tienen que competir fuertemente junto al resto de negocios que todavía quedan abiertos por la baja demanda. Esta competencia se ha visto en la caída de precios del mercado, con suculentas ofertas para intentar atraer a las pocas personas que quieren irse de vacaciones en estos duros momentos. ¿Pero por qué no competir en seguridad? Ofrecer un establecimiento hotelero con fuertes medidas para luchar contra el coronavirus creo que es un reclamo que tendría gran éxito.
En este artículo vamos a hablar de medidas y productos que no pueden faltar en ningún establecimiento hotelero para ofrecer verdadera seguridad a sus clientes en materia de Covid.
Detección de fiebre
Muchos hoteles en el momento de realizar el check in por parte de los clientes realizan medidas de detección de fiebre a través de termómetros. Pero existen mecanismos mucho más fiables y que no solo se producen durante un breve instante.
Hablamos de las cámaras termográficas. “Ofrecen la temperatura corporal en tiempo real de personas que se encuentran hasta metro y medio del dispositivo y el margen de error es de medio grado”, explican desde Ibertrónix Infrared & Vision S.L., empresa especializada en la medición de temperatura mediante sistemas termográficos.
Vamos, un sistema mucho más fiable que los termómetros porque no sólo se medirá la temperatura una vez, sino cada vez que una persona pase cerca de los dispositivos. Además con esta medida se evita que la gente se prepare para la detección de temperatura a la llegada al establecimiento, porque se medirá la temperatura constantemente.
Geles hidroalcohólicos
En un establecimiento hotelero no deberían faltar geles hidroalcohólicos, cuantos más mejor. Sabemos que debido a la pandemia cada vez que tocamos cualquier cosa nos sentimos sucios e inseguros, por ellos es fundamental que no falte gel nunca. Además, por supuesto para evitar la propagación del virus.
Estos geles no deberían faltar en lugares de alto tránsito como pasillos, comedores, baños y en la entrada de los ascensores, ya que vamos a tocar los botones.
Alfombras desinfectantes
Disponer de alfombras desinfectantes a la entrada del hotel, en el hall o a la salida hacia los espacios exteriores sería muy recomendable. Son artículos bastante económicos que han demostrado eficacia y también por la sensación de seguridad que estamos hablando en este artículo. Como ya sabrás, las alfombras desinfectantes constan de dos zonas, una para la desinfección del calzado y otra para el secado y de esta manera se evita que el virus se propague a través de nuestros pies.
Priorizar el uso de tarjetas frente al dinero
Una medida muy fácil de aplicar en cualquier alojamiento turístico es priorizar el uso de tarjetas bancarias, o las propias tarjetas o llaves del hotel frente al dinero físico. Por ejemplo, las consumiciones del bar se pueden cargar a la tarjeta y así se evitará el contacto a través del dinero.
Las pequeñas medidas marcan la diferencia
Cuando hablamos de seguridad frente al coronavirus además de todas las acciones y medidas anteriormente enunciadas, son las pequeñas cosas las que marcan la diferencia. Por ejemplo, en una habitación hay elementos que los huéspedes siempre tocan y aunque se limpien da mayor seguridad saber a ciencia cierta que eres la primera persona que lo va a tocar. Estos elementos son por ejemplo el mando a distancia o el aire acondicionado. Cuesta muy poco protegerlos con un plástico y cambiarlo cuando vaya a entrar un turista nuevo, así tendrá una sensación de mayor seguridad y limpieza.
Estas solo son algunas medidas interesantes que los hoteles deberían y podrían implantar para ofrecer mayor seguridad a sus huéspedes. No obstante, se podrían aplicar muchas más como poner plásticos desechables para proteger las hamacas de la piscina y que éstos se cambien cada vez que llegue un nuevo cliente, dejar un pequeño kit con mascarillas y gel en las habitaciones…