El cultivo del olivo en España hunde sus raíces en la cultura mediterránea de la que forma parte la península ibérica y llega a nuestros días siendo un elemento no solo cultura, sino de identidad de nuestro país, de la marca España, así como lo es de la dieta mediterránea.
El cultivo del olivo se remonta al 3000 y 4000 a. C. en las civilizaciones del Medio y Próximo Oriente, pero serían los Fenicios muy probablemente, junto a los Egipcios los que contribuirían a su expansión por toda la franja del Mediterráneo llegando por toda la costa hasta la Península Ibérica. No debemos olvidar que el clima necesario para el cultivo del olivo es el que se basa en la poca necesidad de regadío y en las temperaturas cálidas. Tanto sumerios, asirios, egipcios y más tarde fenicios, griegos y romanos, utilizaban el aceite de oliva tanto para el uso religioso, así como para el alimenticio y el cuidado del cuerpo. Poco a poco, cada civilización fue añadiendo sabiduría y conocimientos tanto al cultivo del olivo como a la extracción del aceite, y serían los romanos los que definitivamente extendieron su cultivo y comercialización por todo su imperio desde Hispania hasta el Oriente y de Norte a Sur allí donde el clima lo permitía o el olivo podía adaptarse.
El aceite de oliva mantiene a muchas familias en España
España, hoy en día, cuenta con un enorme patrimonio económico gracias a la mayor extensión del mundo en olivo, con 2’5 millones de hectáreas distribuidas en 34 provincias de la geografía española y con 300 millones de olivos. Pero no solo con ello, España es el país líder en producción, comercialización y exportación de aceite de oliva, con sus 1.200.000 toneladas al año. La calidad del aceite de oliva español es indiscutible, este país cuenta con 26 Denominaciones de origen de aceite de oliva virgen y virgen extra que dan testimonio de su calidad, de su cultivo, recogida, elaboración, embotellado y etiquetado. Muchas marcas comerciales, como Nuestra Señora de los Ángeles, han perseguido estar entre las mejores del mundo y ser las más reconocidas, para ello están apostado constantemente por la calidad
¿Pero porqué es tan apreciado el aceite de oliva? ¿porqué tiene tanta demanda y se vende tanto? No solamente se trata de un elemento intrínseco a la cultura mediterránea, sino que son muchos los profesionales de la nutrición los que alaban las cualidades beneficiosas que tiene para la salud dentro de la tan idolatrada dieta mediterránea. Entre los beneficios de este oro líquido los profesionales destacan los siguientes:
* previene las enfermedades cardiovasculares: el ácido oleico contenido en el aceite de oliva ayuda a la reducción del colesterol malo incrementando el bueno, la vasodilatación arterial que mejora la circulación sanguínea y que ayuda a la disminución de la presión arterial.
* favorece el funcionamiento digestivo y evita el estreñimiento
* contribuye al desarrollo y mineralización de los huesos
* previene la oxidación celular
* ayuda a reducir las muertes por enfermedades cardiovasculares y cáncer
Pero no solamente el aceite de oliva es beneficioso a través de la alimentación, sino que los antiguos ya nos enseñaron el abanico de posibilidades que ofrece para el cuidado personal. Cada día son más las aplicaciones del aceite de oliva, entre ellas destacamos las siguientes cualidades:
* su carácter nutritivo natural e hidratante para pieles sensibles y/o atópicas, así como sus cualidades como mascarilla antioxidante para la cara
* se trata de un ungüento para el afeitado ideal
* sirve de mascarilla capilar para el cabello seco, quebradizo y sin vida
* reparador de labios
* sus nutrientes fortalecen las uñas, y suavizan cutículas y manos gracias a su efecto lubricante.
Sin duda los antiguos sabían lo que se hacían con el cultivo del olivo. Obviamente fue con los años con los que se fueron descubriendo nuevas aplicaciones para el líquido obtenido de la oliva, sus diferentes usos, para rituales religiosos, su consumo alimenticio, y sus aplicaciones para el cuidado del cuerpo se fueron adquiriendo y desarrollando con el paso del tiempo, pero sobre todo, gracias a su extensión por toda la franja mediterránea, gracias a la influencia de los diferentes pueblos se fue ampliando el abanico de usos del aceite de oliva hasta llegar al día de hoy. Gracias a estas diferentes influencias podemos hablar hoy en día de un super alimento así como de un super fruto obtenido del cultivo de un árbol. Sin duda tenemos mucho que agradecer a la cultura mediterránea y a todos los pueblos que tradicionalmente han desarrollado su cultivo.