El vino forma parte de la vida del hombre desde la antigüedad, estando asociado siempre a los mejores y peores momentos. Por un lado, como parte de los más felices instantes de goce y alegría y, por otro lado, para hundir y ahogar los momentos de sufrimiento y dolor. De ello nos dejó constancia Hipócrates, el gran médico de la antigua Grecia, en su célebre pensamiento “El vino es una cosa maravillosamente apropiada para el hombre si, en tanto en la salud como en la enfermedad, se administra con tino y justa medida”, pues el vino tal y como explica el investigador J. Fehér y su equipo de la Universidad de Semmelweis, de Budapest, el vino se ha consumido por sus efectos medicinales desde hace miles de años.
Numerosos son los estudios científicos que durante las últimas décadas han estudiado los beneficios que representa para la salud un consumo moderado de vino, entendiendo por consumo moderado una copa de vino al día, aconsejando tomarla acompañando el momento de la comida. Un vino que cumpla con las máximas medidas de seguridad y calidad alimentaria como los que se elaboran y embotellan en Bocopa Bodegas, una empresa que acoge a varias bodegas de Alicante y que cuenta con el reconocimiento BCR (Global Standard For Food Safety) y IFS (International Food Standard), así como las certificaciones ISO 9001 e ISO 14001.
Entre los beneficios del vino para la salud se encuentran los siguientes:
- Efecto cardioprotector. El vino es una bebida rica en flavonoides, taninos y polifenoles, unos compuestos fenólicos que se encuentran en frutas, verduras y semillas, considerados unos grandes antioxidantes con características antiinflamatorias que proporcionan un efecto vasodilatador beneficioso para las arterias, y que asisten al sistema inmunológico contribuyendo a reducir el colesterol malo o LHL, previniendo así los ataques al corazón.
- Propiedades antibacterianas. El vino posee la capacidad de reducir las bacterias de los alimentos, actuando como protector del cuerpo humano, a la vez que ayuda al crecimiento de la flora intestinal.
- Reduce el riesgo de sufrir determinados tipos de cáncer. Según estudios, la inflamación juega un papel fundamental en algunos tipos de cáncer, siendo el resveratrol, un flavonoide presente en el vino, el responsable de las cualidades antiinflamatorias de este.
- Actúa contra la depresión. El vino estimula al cuerpo humano a liberar endorfinas, una sustancia química que nos hace sentir de buen humor, a la vez que aleja de nuestras vidas la depresión.
- Previene el alzhéimer y el párkinson. Según estudios realizados, el estrés oxidativo es un factor de riesgo para enfermedades tan importantes como la demencia, el alzhéimer o el párkinson. El resveratrol reduce la viscosidad de las plaquetas de la sangre manteniendo los vasos sanguíneos libres de coágulos, lo que ayuda a retrasar el envejecimiento y mantener un buen suministro de sangre al cerebro.
- Protege a la piel de los rayos ultravioleta. Según un estudio realizado y publicado por la Universidad de Barcelona, los flavonoides presentes en las uvas y el vino protegen la piel del daño provocado por los rayos ultravioletas (UV).
Las cifras del vino en España
España está ligada desde tiempos inmemorables a la producción, elaboración y consumo del vino. El sector vitivinícola español tiene gran fuerza en la economía del país, no en vano la producción de vino en la campaña 2019/2020 alcanzó la nada desdeñable cifra de 33.675.603 hectolitros, de los que 14.568.368 hectolitros, es decir el 43,36%, tienen Denominación de Origen Protegida, y el 12,82%, es decir 4.315.653 hectolitros, son vinos con Indicación Geográfica Protegida. En España actualmente existen 70 denominaciones de origen y 42 indicaciones geográficas que se producen en unas 969.000 hectáreas repartidas en las 17 comunidades autónomas que cosechan alguna de las 150 variedades autóctonas españolas. Según el Ministerio de Agricultura, pesca y alimentación es Castilla-La Mancha la comunidad que mayor producción presenta con 28,7 millones de hectolitros.
Todo ello hace que, según la Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV), nuestro país se convierta en el tercer productor mundial de vino, tras Italia con una producción de 48,9 millones de hectolitros y Francia con 47,4 millones de hectolitros. Esta misma Organización Internacional nos coloca en el año 2019 en el segundo puesto internacional como país exportador de vino con 2.154 millones de litros exportador frente a los 2.162 millones de litros exportador por Italia, principal país exportador a nivel mundial.
Los principales destinos de los vinos españoles en el exterior en 2019 fueron por este orden, Alemania, Estados Unidos, Reino Unido, Francia, China, Países Bajos, Portugal, Suiza, Canadá, Japón, Bélgica, Italia, México, Suecia y Rusia.