Una sociedad depende en buena medida de la educación que reciben sus jóvenes, que van a ser quienes se encarguen de dirigir su futuro. Desde luego, es evidente que, cuanta más calidad educativa, más prometedor será el futuro de una sociedad como de la que venimos hablando. Es algo que nunca puede olvidarse y que ha de ser tenido en cuenta por todos y cada uno de los gobernantes que formen parte de una nación, con independencia del nivel territorial en el que desempeñen estas funciones si es que el país en cuestión presenta un sistema federal o cuasi federal, como es el caso de España.
Ver más